"...En la presente causa, la sala de apelaciones erró al indicar que existían circunstancias que agravan la conducta del procesado, tales como la brutalidad o sea el ensañamiento y la misoginia, pues, éstas son circunstancias que tuvo por acreditadas el sentenciante para calificar el hecho como femicidio. Esas agravantes ya fueron consideras por el legislador como elementos del tipo penal, y por lo mismo, no se le debe considerar para graduar la pena, pues, de hacerlo así se viola el artículo 29 del Código Penal.
No obstante lo indicado, la sala observó que, el tribunal de sentencia, para la imposición de la pena, tomó en cuenta la extensión e intensidad del daño causado. Ese razonamiento es correcto porque no se soporta en el perjuicio que ha sido considerado por el legislador como elemento del tipo penal. En el presente caso, como consecuencia del ilícito penal, se produjeron secuelas de afectación familiar, como la orfandad de tres niños, ya que la víctima era la que cubría los gastos de la manutención de sus hijos menores, quienes quedaron en manos de su abuela materna, quien vive en situación de pobreza y atraviesa problemas de salud y psicológicos como consecuencia del hecho. Dichas circunstancias quedaron plenamente probadas, con las investigaciones realizadas...
La sala de apelaciones, tomó en consideración para agravar la pena los motivos fútiles o abyectos, como agravante contenida en el numeral 1º del artículo 27 del Código Penal. Cámara Penal estima que ésta circunstancia sí permite graduar la pena, porque no es propia del delito de femicidio, y aunque no estaba contenida en la acusación del Ministerio Público, como lo aduce el casacionista, debe indicarse que no se acusa por tipos penales, ni por conceptos, sino por hechos. Del hecho acreditado, se demuestra la agravante de motivos fútiles o abyectos, ya que el procesado, motivado por cuestiones insignificantes como una pelea, y el odio hacia una mujer que consideró marera, le provocó la muerte, lo que claramente se evidencia de la frase que escribió con la sangre de su víctima "Salva Trucha Por Marera"..."